10 pasos para combatir el estrés antes de la boda

Pensó que no iba a sentir estrés durante la preparación de su boda, pero allí estaba. Desbordada con todos los preparativos y cansada de no pensar en otra cosa más que en su matrimonio.

Una boda es un evento muy emotivo, emocionante y puede llegar a ser sumamente especial para mucha gente. Sin embargo, y precisamente por lo especial que puede resultar, igualmente puede suponer una gran fuente de estrés. | Pide cita con una especialista si los síntomas de estrés te están impidiendo llevar tu día con normalidad.

Las  circunstancias  más comunes que generan estrés antes de la boda son, entre otras:

• Los pequeños detalles, para lo cual es importante aprender a delegar y dividir responsabilidades.
• Olvidarse de algo: Para evitarlo en la medida de lo posible, te aconsejamos planificar lo mejor posible, hacer listas, confirmar días antes con proveedores, etc.  
• Otro temor en el día de la boda es que haga mal tiempo, cosa que no depende de vosotros en ningún caso, pero te aconsejamos prever alternativas con los responsables del lugar de la celebración o los organizadores.  
• La organización de los invitados: Aseguraos de rodearos de aquellos con los que quieras estar de verdad y sean importantes para vosotros.

Te dejamos algunos consejos que pueden ayudarte a gestionar mejor la situación de estrés pre boda:

1. No dudes en pedir consejo y opinión a alguien en quien confíes.

Las dudas y miedos que puedan surgir durante el proceso de los preparativos puede disparar el nivel de tensión y generar una gran cantidad de estrés, por lo que, es mejor compartir esas dudas para rebajar ese nivel de tensión y obtener otras visiones del problema que te permitan tomarlo todo con más perspectiva y tranquilidad. 

2. Haz una lista de lo que queda por hacer

Si los nervios y la tensión se deben a que os está costando organizar los preparativos, aseguraos de hacer un registro de todas aquellas tareas o acciones que sean necesarias y ordenadlas según la urgencia o prioridad. De esa forma, siempre sabréis qué es lo que queda pendiente y os aliviará ver todo lo que ya tenéis hecho.

3. El motivo principal de la celebración:  vuestra unión.

No olvidéis nunca que esta fiesta es para celebrar vuestra relación, para celebraros a vosotros. Este objetivo a veces se ve difuminado, ya que movilizamos a muchas personas y siempre intentamos tener en cuenta las preferencias de todos, pero no intentes contentar a todo el mundo: Es VUESTRA boda. Prioriza aquello que tú  y tu pareja queréis y el significado que tiene para vosotros. 

4. Usar técnicas de relajación puede ser una buena herramienta.

Las más frecuentes son las técnicas de respiración, que puedes llevar a cabo minutos antes de la ceremonia, concentrándote en tu respiración y cómo el aire recorre tu cuerpo, usando si es posible la respiración diafragmática, ayuda a reducir los niveles de ansiedad y combatir el estrés. También puedes usar la técnica de relajación progresiva de Jacobson, que es una técnica centrada en la tensión y distensión muscular. 

5. Descansar es importante

No dormir lo suficiente puede afectar también en nuestro nivel de estrés. Afecta negativamente a nuestra concentración y recursos cognitivos y genera irritabilidad. 

Por ello es altamente aconsejable que, para combatir el estrés, aprovechemos a descansar todo lo posible durante los periodos de sueño, sobretodo la noche anterior, aunque esa noche es especialmente complicado. Puedes apoyarte en las técnicas mencionadas anteriormente para conciliar el sueño mejor.

6. Comunícate  con tu pareja

Seguramente tu pareja también se sienta nerviosa antes de la boda, es totalmente normal, pero puede que no los exprese o exteriorice del mismo modo. Os aconsejamos hablar de ello abiertamente y compartáis aquello que os inquieta, de cara a solucionarlo entre los dos cuanto antes.

7. La vida sigue

Casarse es un paso importante, y supone una gran inversión emocional, por lo que es fácil que lleguéis a obsesionaros con el tema cuanto más cerca estéis del día B. Sin embargo, si mantenéis las rutinas cotidianas y hacéis vida normal y prestáis atención a otros temas, os distraéis y compartís tiempo y actividades con otras personas, os ayudará a mantener a raya los nervios prenupciales. 

8. Pide ayuda 

¡Saber delegar es liberador! Sobre todo en eventos como una boda. Si la presión nos supera, es importante pedir ayuda a personas de nuestro entorno para organizar o buscar profesionales que se dediquen específicamente a organizar celebraciones.  

9. Relativiza

De acuerdo, es vuestra boda y es un momento importante, emocionante y es completamente razonable que queráis que todo salga lo mejor posible, pero también puede que surjan complicaciones y no debemos obsesionarnos con ellas: No se acaba el mundo si algo no sale como preveíais. En los preparativos de una boda ¡siempre hay anécdotas!

10. Una cita contigo misma

No dudes en apoyarte en tus seres más queridos para todo lo que conllevan los preparativos: Pasa tiempo con tus amigos, familia y pareja, distraeros sin hablar solamente de la boda, ¡hay muchos más temas de conversación! Y sobre todo, regálate momentos para estar a solas, para ti, para conectar contigo misma de nuevo. 

Finalmente, decidió que la boda no debería ser una razón para estar estresada y que iba a hablarlo con su pareja para redistribuir las cargas de los preparativos, comentarle su situación y ver cómo podían tomarse un segundo para ellos antes del gran día.

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